Una de las preguntas que nos hacemos cuando se inicia nuestro proceso de despertar de consciencia tiene que ver con el propósito.

Pero también nos preguntamos qué es eso que vinimos a aprender y que nos allana el camino hacia el cumplimiento de nuestro propósito.

Al principio, el llamado de atención nos llega en forma de situaciones complejas. Problemas que hacen que te preguntes: ¿por qué a ti?

Una vez lo analizamos, nos damos cuenta de que hay cosas que nos han pasado que “tienen que ver con lo mismo”, o que son cosas que parecen “volver” a nuestra vida de forma circular.

Te estoy hablando de eso que se suele llamar “karma”, que en términos menos dramáticos tiene que ver con algo que necesitamos iluminar - aprender.

En el post anterior te comencé a contar sobre el número karmático, conocido también como deseo del alma, y que podemos obtener con las vocales de nuestro nombre.

Al final del post te explicaré cómo hacerlo. Ahora, continuemos con el significado de los números del seis al nueve.

Número del karma o aprendizaje: lo que no has resuelto, lo que no has aprendido

Cuando el resultado es 6, significa:

Que tu alma quiere armonía, quiere experimentar la belleza del mundo a través del arte. Quiere abarcar el conocimiento de lo humano y lo divino. Todo lo cual ocurre en un universo emocional trastornado.

También significa que viniste a trabajar una tendencia al conflicto, a la pasión esclavizante, la armonía en las relaciones, la responsabilidad

Ahora, imagina una situación que refleja este tipo de aprendizaje: conflictos familiares con la figura paterna (o su ausencia) en medio de situaciones pasionales con potencial destructivo.

Imagina situaciones que te mueven −incluso de forma compulsiva− hacia el servicio hacia los demás, hasta el sacrificio. Y claro, relaciones de pareja pasionales con tendencia al descontrol.

Cuando el resultado es 7:

Significa que tu alma quiere quietud y silencio, intimidad y recogimiento, tranquilidad hasta adoptar el carácter aislado del ermitaño. Quiere alcanzar la plenitud del conocimiento.

Ahora bien.

También significa que esa persona vino a trabajar la confusión que se genera de tanto profundizar, algo que surge por la influencia constante de una intuición que crea realidades. Realidades que pueden ser indeseables.

Este karma, como los otros, se manifiesta de otras maneras y en relación a varias cosas. Básicamente, estos son los aspectos que aparecen para que los trabajes.

Ahora, imagina una situación que nos refleja este tipo de aprendizaje: situaciones familiares complejas, incómodas, dado que quieres estar sola en tu santuario y al tiempo convivir con tus seres queridos.

Imagina a una persona con problemas de fertilidad; imagina a personas con una vocación espiritual que se manifiesta como una antropología salvaje y hambrienta de las múltiples creencias disponibles en distintas religiones y corrientes místicas.

Cuando el afortunado 8 aparece como número karmático:

Significa que quieres mandar. Quieres poder ejecutivo, estatus y prestigio, fundar, dirigir y hacer crecer empresas.

Muchos ex presidentes y grandes empresarios tienen esta vibración entre los números de su fecha de nacimiento. Ellos mandan y controlan, tienen capacidad de trabajo.

Y aquí vamos: también significa que esa persona vino a trabajar la avaricia y el control, la perseverancia, la tendencia a ser un tirano o un déspota sin capacidad para discernir.

Como los otros casos, este aprendizaje se manifiesta de otras maneras y en relación a sus otros números. Por lo general, estos son los aspectos que aparecen para que los trabajes.

Ahora, imagina una situación que refleja este tipo de aprendizaje: proyectos empresariales, personales, de relaciones, que de repente se van al traste por ambición desmedida, por no saber discernir, por no soltar el control.  

Cuando el 9 es el karma y el aprendizaje:

Significa que quieres ser una benefactora, un filántropo. Ya experimentaste lo que significa canalizar energías para fundar y hacer crecer empresas. Ya sabes lo que es la abundancia, la influencia y el prestigio.

Ahora quieres ayudar a la humanidad.

Personalidades legendarias relacionadas con el interés universal tuvieron esta vibración. Baste mencionar a Mandela o a Gandhi.

Pero, aquí vamos: también significa que viniste a trabajar los cierres de ciclo (viven sufriendo por lo que fue que no debió haber sido o por lo que debió haber sido que no fue).

La guerra siempre está latiendo en su corazón, hasta que entienden que son seres capaces de experimentar ambas caras de la dualidad.

Como los otros casos, este aprendizaje se manifiesta de otras maneras y en relación a sus otros números. Por lo general, estos son los aspectos que aparecen para que los trabajes.

Ahora, imagina una situación que nos refleja este tipo de aprendizaje: personas que se pierden en la violencia de las armas, gente de una compasión que pasa de la responsabilidad que tiene la gente a la que pretenden ayudar.

¿Cómo calcular el número que expresa el deseo de tu alma y el aprendizaje que viniste a realizar?

Calcular este número es realmente sencillo, incluso si no te gusta sacar cuentas. Veamos el paso a paso:

  1. Escribe el nombre completo de la persona sobre el papel.

2.  Toma el alfabeto numerológico (el pitagórico es el más usado).

3. Traduce cada vocal a número y anótalo encima de cada letra.

4. Suma todos los números.

5. Reduce el resultado a un solo número. Si el resultado es 42: 4 + 2 = 6.

6. Interpreta el resultado.

Y eso es todo.

¿Preparad@ para conocer lo que viniste a aprender?*

Un saludo.

Amaury.

* Para conocer más sobre este tipo de estudio, puedes escribirme al correo amauryconsultor18@gmail.com

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