¿Conoces la Terapia de Respuesta Espiritual?

La Terapia de Respuesta Espiritual no debe confundirse con la técnica TRE®, la cual consiste en una serie de ejercicios que producen una vibración espontánea del cuerpo, llamada temblor neurogénico, generando una disminución de la tensión muscular y produciendo un estado de relajación y calma del sistema nervioso, de manera simple y segura.

La TRE® fue creada por el trabajador social norteamericano Dr. David Berceli a partir de su trabajo con comunidades afectadas por la guerra en Medio Oriente y el África.

En este artículo me voy a referir a la Terapia de Respuesta Espiritual (T.R.E.) que es un método de investigación y sanación que permite el acceso a los archivos akáshicos, también llamados archivos del alma, a través del subconsciente.

Es un minucioso sistema de investigación y limpieza de los archivos akáshicos, para encontrar bloqueos que nos generan retos a nivel mental, emocional, físico y espiritual.

¿Cómo funciona?

El proceso de investigación y limpieza se realiza con la guía del Yo Superior o Espíritu, a través del cual accedemos directamente a los archivos del alma para identificar fácilmente programación discordante y creencias limitantes.

El método, desarrollado por Robert Detzler (1926 – 2013), un ministro retirado de la iglesia UNITY de los Estados Unidos, quien con la firme convicción de que toda la sabiduría y la guía de nuestro transitar por la vida reside en el interior de cada persona, perfeccionó una técnica de los psicólogos Clark y Sharon Cameron, para identificar el origen de los problemas, padecimientos o bloqueos, y así, reestructurar los programas o cargas energéticas negativos ligados a ellos y producir en consecuencia, la sanación o desbloqueo de esos problemas.

Está basado en el uso del péndulo y más de 32 gráficos de estudio, para identificar el origen de los problemas, padecimientos o bloqueos que nos conectan con la mente supraconsciente identificada como Yo Superior o Espíritu, nuestra parte divina, y acepta la premisa de que todas las personas hemos experimentado existencias previas tanto en los reinos espirituales como en el plano físico, y así, reestructurar los programas o cargas energéticas negativos ligados a ellos y producir en consecuencia, la sanación o desbloqueo de esos problemas.

Cuando realizamos una sesión de T.R.E., estamos ante un grupo de gráficos específicos, más de 32 diferentes, que contienen información detallada sobre programas y/o energías discordantes. Tenemos también en la mano un péndulo, cuyos movimientos (respuesta ideomotora) nos permiten encontrar información en los diferentes gráficos.

• Gráfico 1: es la brújula, con el que somos guiados por el Yo Superior para acceder a los programas que deben ser limpiados.
• Gráficos 2 al 9: son gráficos del campo físico, ligados a las experiencias obtenidas en las diferentes encarnaciones.
• Gráficos  11 al 31: son gráficos del campo espiritual, relacionados con las experiencias del alma antes de encarnar, y con las pre-programaciones creadas por el espíritu.
• Gráfico 32: es la lista de chequeos.

Con estas sencillas herramientas, un péndulo, los gráficos especializados, una mente abierta y una persona capacitada y avanzada en el mundo de la T.R.E. que sirva como guía, serán la puerta a la sanación espiritual y el acceso al subconsciente que se mostrará a través de nuestro consciente para darnos las respuestas sobre nosotros mismos.

Es necesario recordar que esta terapia no es adivinatoria ni busca cambiar quien eres y convertirte en alguien distinto.

La terapia se enfoca en el conocimiento del verdadero ser; esto significa que quien serás al final de todo no será “alguien nuevo” sino quien siempre fuiste y no sabías.

Los 5 pasos de la T.R.E.

La T.R.E. es una técnica llena de luz. Al terminar una sesión de T.R.E. saldrás con una sensación de tranquilidad, entendimiento y liberación que se generan al conocer la razón por la cual estabas viviendo cierta situación y las programaciones en vidas pasadas relacionadas con ella.

Esta práctica es adecuada para eliminar bloqueos, programas, larvas astrales, creencias limitantes, desencarnados, votos y energías discordantes, que son producto de interacciones actuales o que podemos arrastrar de encarnaciones pasadas.

1. Se inicia con la petición de permiso al Yo Superior o Espíritu, para trabajar con el Yo Superior del consultante. Seguidamente, con el péndulo y los gráficos, se solicita información sobre la existencia de programas instalados, que afectan la potencialidad y desenvolvimiento de la persona.
2. Una vez determinado el punto anterior, extendemos la investigación para descubrir la razón por la que se instaló el programa, cuándo sucedió, los involucrados en la situación, y las energías negativas asociadas, abarcando todos los aspectos espirituales que sean necesarios trabajar, los cuales irán siendo indicados por el Yo Superior a través del péndulo durante toda la sesión.
3. Concluida esta etapa, se procede con la limpieza y la reprogramación de valores positivos. Además, el haber limpiado dichos programas y al ser reemplazados por otros positivos, te permitirá salir con una energía renovada y equilibrada; sabiendo que todo empezará a fluir de una manera diferente y más armoniosa a partir de ese momento.
4. Los movimientos involuntarios sobre dichos gráficos, nos dirigirán a opciones determinadas que están escritas en los gráficos y con lo cual, la respuesta indicada se tendrá como una respuesta a la pregunta formulada, la cual, a su vez, irá llevando en secuencia a otros gráficos durante toda la duración de la sesión, hasta completar la terapia completa
5. Adicionalmente, si es tu deseo y compromiso, puedes reforzar a nivel consciente el trabajo realizado a nivel del alma y saldrás con algunas tareas o sugerencias hechas por tu Yo Superior para aplicar en tu cotidianidad.

Si existen otros programas presentes, se reinicia el procedimiento desde el inicio (cada programa se elimina de forma individual).

Al liberarnos de las cargas negativas y reprogramar los principios positivos de nuestra esencia, estamos sanando el alma, conectando con la divinidad y su amor infinito.